En este volumen, Francisco Segovia reúne dos poemas que se juntan sin mezclarse, dos opuestos en su flujo y extensión. El primero, Desheret, es un oscuro, denso y fragmentario relato de un muerto que camina errante entre la muerte, representada por el polvo y la arena, y la sed de la vida. Agua, por el contrario, es un poema oceánico, luminoso, que revela el misterio que se esconde en su profundidad.