I. EL ACTOR EN SU HISTORIA

Hablando del impresionante florecimiento del teatro a partir del siglo XVII, Gené dice: ´tal profusión y simultaneidad de genios, tal cúmulo de obras maestras, sólo es posible porque se ha generado ese ser paradójico que es el actor...´. Es esta interrelación entre las condiciones históricas y sociales del quehacer actora! en diferentes momentos y las características que adopta su participación en el fenómeno teatral lo que hace tan interesante este ensayo, el primero de tres que, dedicados a los actores, publica Paso de Gato de la pluma de este autor.á´Los currícula´ —dice Gené— siempre los escribe el autor, simulando, no sé por qué, que es otro el que canta los méritos del personaje. Dejemos la simulación. Los años y la profesión me han hecho actor, director, dramaturgo y pedagogo. El exilio dio a mi trabajo proyección hacia Iberoamérica. He incursionado en la televisión y el cine como dramaturgo y como actor. En teatro, en cine y en televisión he recibido toda clase de premios en varios países, que detallados fastidiarían al lector. Quizá todo se sintetice en que Venezuela —donde viví y trabajé 17 años— me condecoró con su Orden Andrés Bello por servicios prestados a la cultura, y que Buenos Aires, mi ciudad, me tituló Ciudadano Ilustre de ella. Durante mi exilio en Venezuela, fundé y dirigí durante 10 años el Grupo Actora! 80 que, tras 28 años de trabajo ininterrumpido, sigue hoy, conducido por quienes fueron mis discípulos. He sido secretario y presidente de la Asociación Argentina de Actores, director general de la Televisión Pública argentina y del Teatro San Martín (oficial de la ciudad de Buenos Aires). Actualmente ejerzo la presidencia del Celcit-Argentina´