Muchos aún están convencidos de que existe una trayectoria obligada del amor que comienza con el enamoramiento y la pasión, pero luego declina y se extingue en la convivencia cotidiana, cuando no acaba en la traición y el divorcio. Pero se equivocan. Este libro demuestra que la felicidad y el placer más intensos son posibles solamente en el gran amor erótico que conserva la frescura del enamoramiento, el ardor de la pasión y que, en vez de debilitarse, se intensifica con el paso de los años.