En un mundo en el que casi no hay justicia, o se desmorona hasta el punto de la burla, ¿es justificable la justicia privada? El presente relato, a través de su complejo protagonista –un doctor que de súbito decide enfrentarse a la culpa colectiva–, se basa en esa pregunta. Nos encontramos en Argentina después de la Guerra Sucia y la debacle de las Malvinas. Alguien envía cartas amenazantes y anónimas. Alguien abandona una casa solariega en Yorkshire para el encuentro fatal en Londres de dos personajes con el mismo nombre y apellido. La atmósfera es de novela negra o de thriller, una trama trenzada con sutil maestría y una dinámica imparable.