En El olli en la plástica mexica se muestra la suma de las propiedades de olli-hule, así como la manera en la cual los nahuas aprovechan algunas de esas características.De ahí que todas sus aplicaciones -artísticas, rituales, prácticas, medicinales- son exploradas por la autora.Se reconocen las diversas representaciones del olli en los códices prehispanicos, en objetos cerámicos, en esculturas y murales, y en ellas la autora observa que determinadas marcas pintadas en los rostros, en la indumentaria y en elementos asociados a deidades y rituales específicos son convenciones culturales propias de los nahuas para evocar el olli, aunque no fuese hule el material con el cual se pintaron.