Veinticinco ensayos sobre poetas y narradores contemporáneos, escritos no por un crítico literario, sino por un poeta que además es editor, traductor y un excelente crítico literario. Y eso cambia todo. Articulado a partir de una sutil aunque constante oposición entre dos posibilidades -textos de juventud y de madurez, poesía y prosa, escritores célebres y poetas jóvenes-, el libro hace eco del cuadro de Degas, en el que un grupo de gente, dividida y enfrentada, es visto en el instante previo al inicio de una gozasa lucha -un instante de detención, de tensión, en el que están contenidos todos los movimientos que un momento después, pero fuera del cuadro, pueden darse-.