Las primeras historias del simpar ladrón de guante blanco Arsène Lupin gozaron de un éxito fulminante. Por eso, su creador, Maurice Leblanc, quiso ir más allá: ¿y si el inspector Ganimard solicitara nada más y nada menos que los servicios del detective más famoso del mundo o, el británico Herlock Sholmès?
El privilegiado intelecto de Lupin compite de tú a tú con el de Holmes (perdón, Sholmès). Este díptico compuesto por dos novelas cortas, «La mujer rubia» y «La lámpara judía», contiene la quintaesencia de tan carismáticos personajes y hará las delicias de los amantes del misterio.