Con el semblante y el cuerpo endurecidos. un viejo pescador que desde hace más de dos meses regresan al puerto con la barca vacía, abriga la secretaesperanza de terminar esta vez con la mala racha que le han conseguido el desprecio de los demás pescadores. por su desmesurado orgullo, Santiago ,el viejo pescador, no acepta ninguna ayuda e incluso rechaza la compañia de un niño que lo admira y que, no obstante se poca suerte, desearia acompañarlo en sus salidas al mar. Santiago lucha obstinadamente para conservar a un enorme pez que ha picado su carnada, por lo que el viejoagota toda su energía tratando de controlar el rumbo de la canoa y mantener su preciado trofeo.