Las discusiones entre la izquierda revolucionaria sobre la legitimidad del uso de la violencia y sobre la eficacia de las estrategias no violentas atraviesan toda la historia del movimiento obrero y de los movimientos sociales. En el Estado español esa discusión se vio renovada y potenciada con la irrupción de un potente movimiento antimilitarista y la campaña de insumisión, en los años ochenta y noventa.
La capacidad de movilización, así como la creatividad y originalidad de sus acciones ayudaron a renovar por completo las herramientas de acción y agitación de los movimientos sociales, y su legado sigue estando muy presente en las movilizaciones del 15M, las diferentes campañas por la sanidad y la educación públicas, y, especialmente, en las acciones de la PAH.
Detrás del concepto de no violencia se esconde una riquísima tradición teórica, que abarca desde corrientes que la entienden como un todo (corriente holista), sobre la base de concepciones filosóficas y/o religiosas, hasta corrientes que la entienden como una praxis integral político-social, de carácter revolucionario, de influencia principalmente anarquista, pasando por aquellas que apuestan por razones meramente pragmáticas por la acción no violenta para el cambio político.
El presente libro nos hace partícipes de las discusiones y discrepancias existentes entre las corrientes defensoras de la no violencia, a la hora de definir qué se entiende por acción no violenta y cuáles son sus límites (el sabotaje o destrucción de bienes, la presión psicológica o la coacción, la violencia a nivel simbólico...), y nos presenta la no violencia como una herramienta eficaz de la que se han apropiado numerosos movimientos políticos a lo largo de la historia, sin declararse no violentos y sin renunciar a otras formas de lucha.
Jesús Castañar Pérez
Jesús Castañar Pérez (1974), conocido como Cthuchi Zamarra, es licenciado en Sociología, y diploma de Estudios Avanzados en Conflicto Político, con una tesina sobre los movimientos noviolentos en Sri Lanka.
Se declaró insumiso en el año 93. Ha militado en el Movimiento de Objeción de Conciencia y en la Internacional de Resistentes a la Guerra, organización que le ha posibilitado participar en acciones y seminarios en países tan diferentes como Colombia, Palestina, Filipinas, Sri Lanka, Bélgica, Francia, Grecia o Australia, así como conocer a algunas de las personas de referencia en los debates actuales sobre la acción noviolenta.