Las reformas electorales constituyen una de las mejores expresiones tanto de las coyunturas y condiciones políticas como de los periodos de cambios estructurales más importantes que realiza el Estado. La legislación en materia electoral esta estrechamente relacionadas con las luchas por el poder inmersas en los momentos histórico-político de crisis que ha vivido nuestro país. La creación de las instituciones políticas y sus consecuentes reformas obedecen no solo al impulso proveniente de las estatales, la esfera del poder y las fuerzas opositoras. Los cambios en los sistemas electorales que se han dado recientemente en México han correspondido también a los intentos de modernizacion y democratización de los procesos electorales, pero es innegable que reproducir las instituciones y/o transformar el sistema electoral tienen la finalidad de manejar las condiciones estructurales y coyunturales del ejercicio del poder político