Las razones del mundo es una serie de ecos de un pasado un tanto lejano: la relación con el padre y una sucesión de imágenes y experiencias de la infancia, además del descubirmiento de la vocación de un poeta en una esquina desaparecida del Montreal de hace medio siglo.
La fuerza del verso, la directiva visión de las cosas, el amoroso trazo de cada ser humano y la recuperación de un espacio del cual solamente queda la imagen en la memoria del poeta estructuran una historia donde, en cada estrofa, una revelación se sucede en medio de la cotidianidad. El amor, la soledad, otras presencias y una tibia tristeza ordenan los acontecimientos que, entre la vida y la muerte, dan entereza y valor a la existencia y perfilan las razones del mundo.