Tanto Casa como Mundo Nuevo pueden ser considerados revistas internacionales no sólo por razones obvias de financiamiento y difusión de políticas culturales que siguen los parámetros de sus instituciones -la Casa de las Américas fundada por por el gabinete de Fidel Castro, el Congreso por la Libertad y la Cultura (CLC) y el Instituto Latinoamericano de las Relaciones Internacionales (ILARI)-, sino también por la heterogeneidad de sus discursos, donde el enfoque oficial convive con las prácticas personales de sus directores. Ambas revistas trazan sus líneas discursivas amparadas en conceptos de cultura diferentes, por tanto sus ideas de intelectual se enfrenta en lo ideológico. Mientras que la primera ve la cultura como un agente social transformador de la vida social (el arte como reflejo de la sociedad), la segunda privilegia una idea liberal de cultura, que Norberto Bobbio ha considerado "básica", según la cual la fuente universal de producción cultural es la expresión individual.
