La universidad sigue siendo el <> privilegiado donde se abre el horizonte del pensamiento y la reflexión sobre nuestro tiempo; y una de sus tareas principales es mirar con seriedad la cultura que vive y crea la sociedad actual para que, con su rigor académico, proponga a aquélla un criterio de juicio acorde con la dignidad humana. La sociedad, por su parte, siempre interpelará a la universidad mostrándole sus problemas , sus paradojas y sus clarooscuros; con ello desafía a los univesitarios para que brinden en libertad y creatividad las líneas de solución a aquellos problemas planteados.