Por negarse a sacrificar a una amiga semidiosa durante las pruebas del Sol, los Obsidianos han sido liberados de su prisión celestial y todo en el reino es caos y destrucción. Con el mundo sumido en una noche perpetua Teo, Aurelio y Niya viajaran al obscuro desierto de los restos en una misión de rescate decididos a recuperar la tierra del Sol para restaurar el orden. Sin embargo no solo tendrán que luchar con feroces monstruos inimaginables. Sino que, mientras el reloj hace tic-tac, el trio deberá lidiar con la culpa del trauma, y... un romance floreciente que no dejara de distraer a dos de los miembros de este improvisado equipo.