Aunque estas narraciones parecieran contar la vida de una familia, quien busque una novela encontrará un caleidoscopio de posibilidades entre el sueño y la pesadilla, escenarios de infancia similares a una película de David Lynch, en la que el lobo acecha. La prosa límpida de Ana Paulina Calvillo, fina heredera del relato europeo y norteamericano contemporáneo en México, constituye una voz original y distinta que elige la profundidad de la sugerencia en contraposición al melodrama y la denuncia por la denuncia, tan comunes en nuestros días. La autora logra contagiarnos la nostalgia y el amor por las hermanas Isabela, Galia y Alina, unidas por una serie de deseos, ambientes entrañables y episodios trágicos en una partida de ajedrez en la que la muerte juega sus piezas.