MORENO, HUGO CÉSAR; URTEAGA, MARITZA (COMPS.)
De Sinaloa a Veracruz, de Guerrero a Tamaulipas, de Ciudad Juárez a Oaxaca… el narcotráfico se ha enseñoreado en amplias regiones del país.
Y quienes están en la primera línea de fuego son los jóvenes.
Por ello muy difícil dilucidar si existe un lugar social donde los jóvenes estén a salvo de la violencia homicida producida, en gran medida, por la guerra contra el narcotráfico desatada en 2006.
Amplios contingentes de jóvenes desafilados, asimilados y paralegales corren el riesgo de sucumbir, no sólo porque el exceso de violencia es inherente de las economías sumergidas, sino porque esta violencia se desborda en fuegos cruzados, y porque se ha convertido en una oportunidad para obtener reconocimiento, respeto y poder.