AA.VV
Tras su expulsión de los reinos españoles en 1767, los jesuitas novohispanos consagraron sus duros años de exilio a reflexionar en torno a una sociedad que habría de convertirse en la nación mexicana. Con la inteligencia y la sensibilidad como únicas armas, estos pensadores fueron los primeros en adoptar el gentilicio de “mexicanos”para nuestros habitantes, los que construyeron una memoria común a todos ellos y los que plantearon proyectos útiles para el mejor aprovechamiento de nuestros recursos y de la fuerza de trabajo de nuestros connacionales. ¿Por qué no considerarlos entre nuestros héroes fundacionales?
