MONCADA, LUIS MARIO; ACOSTA, MARTÍN
Dos hermanos siameses unidos por la pelvis tienen insomnio. Después de intentar diversas fórmulas para conciliar el sueño (desde la masturbación hasta el juego de las preguntas), uno de ellos le cuenta al otro la historia de Jean y Paul, dos gemelos siameses separados quirúrgicamente, y de su relación con Sophie —la prometida de Jean.
Con esta obra, Moncada y Acosta vuelven a acometer una veta muy interesante que consiste en recurrir a la novela (en este caso dos relatos contrapuestos) para extraer de ella nuevos materiales para la escenificación, tal como han hecho anteriormente con espléndidos resultados.
Si algo define y da esa muy peculiar cohesión a todos los elementos de la obra es su estructura narrativa: este ir y venir por entre los distintos planos de realidad, en conjunción con un texto que brota caudalosa y vertiginosamente desde los labios de los personajes, termina por obligar al espectador a deponer sus esquemas de percepción acostumbrados y acceder a nuevas experiencias para los sentidos. De esta manera, la lectura que se va teniendo del espectáculo, conforme avanza se va multiplicando como el juego infinito de los espejos que, en esencia, representan estos hermanos siameses.
Pablo Mandoki