Los virus, esos enigmáticos compañeros de la humanidad, considerados los conquistadores perfectos, pero también portadores del código de la vida, son abordados en esta obra desde diferentes aristas: como mínimas estructuras que se replican en plantas, animales y humanos; como causantes de numerosas enfermedades en los organismos vivos; como indispensables para el equilibrio de los ecosistemas; como vehículos de la evolución y como protagonistas de la historia de la humanidad, por el papel que han desempeñado en las guerras de conquista y en los avances de la ciencia y la tecnología médica. Como un ejemplo de ese prisma se presenta al virus de la influenza, que por su capacidad de mutación y propagación ha sido causante de numerosas epidemias, entre ellas la primera pandemia del siglo XXI, que se describe extensamente en la segunda parte del libro.