Si alguna forma hubiera de llenar los espacios en blanco, las infinitas soledades, los atisbos a los mundos particulares, prohibidos de tan íntimos; con toda certeza, Blanca Toledo Minutti la encontraría. Porque su visión medular de los mundos personales está de tal manera cargada de sutilezas que no puede uno sino regocijarse en su lectura para solaz esparcimiento de los espíritus sensibles.