El escritor Enrique Díez-Canedo hizo de la conversación un género literario, no sólo porque según testimonios de muchos contemporáneos suyos la practicaba refinadamente en la vida diaria sino porque, ya por escrito, la volvió una manera de rendir culto a la amistad y al gusto estético, reuniendo en ella tanto el testimonio personal como la intuición de la lectura al correr de las páginas, tanto el señalamiento crítico como la anécdota, en un sabroso guiso que atrae e invita a frecuentar y a profundizar en esa charla. En este libro encontrará el lector una selección de las Conversaciones literarias, seleccionadas y prologadas por Adolfo Castañón, desde las primeras publicadas, allá por la segunda década del siglo XX, hasta las últimas que publicó.