En 1924, disfrazada de mendiga, tras miles de kilómetros a pie, Alexandra David-Néel entró por fin en Lhasa, la capital del Tíbet prohibida a los extranjeros. Con ello, cinceló una imborrable leyenda personal hecha de viajes extraordinarios alrededor de Asia, que la llevó a ser considerada como la occidental que mejor había comprendido la espiritualidad de Oriente. Exploradora incansable, fue la primera mujer europea en recorrer el país de las nieves; a los 78 años fue ordenada lama budista, y al cumplir los cien renovó su pasaporte, por si aún quedaba alguna aventura por vivir.
En su ya clásico manual, David-Néel ofrece una extraordinaria descripción de los principios del budismo: la vida de Siddharta, las Cuatro Nobles Verdades, el sufrimiento y sus orígenes interdependientes, el Noble Óctuple Sendero o la vía de la liberación, el karma o ley de encadenamiento infinito de las causas y efectos, el nirvana o la extinción de la ignorancia, los deseos y los agregados mentales, el mahayana y las escuelas budistas de meditación, la teoría del ayala en el Tíbet, el tantrismo tibetano y mucho más.