Las pocas obras que se conservan del artista holandés El Bosco se encuentran entre los iconos más famosos de la historia del arte. Sus pinturas, únicas como libros ocultos, están pobladas por monstruos y demonios, híbridos, gente de árboles y pájaros, sapos, búhos, dragones y unicornios. Todo el cosmos del ingenioso fantasioso se despliega aquí en multitud de ilustraciones y detalles.