Animal desbocado alude al nuevo hombre, que habitando la posmodernidad, juega con su propio babel, ensayando y dialogando constantemente con su pasado. Un hombre dividido que pertenece a una sociedad dividida. Uno que atina a entornar los ojos y abrirlos completamente al pasado, pero que en esa lid consigue soberbias y desconsoladoras notas.
El elemento visceral de lo cotidiano se incrusta en este libro, acercándonos a un recuento de sucesos sublimemente punzantes, totalmente humanos.