ALICIA ADORADA EN MONTERREY
CAJAMARCA, ORLANDO
Pareciera que para los mexicanos la historia de la migración comienza en el terruño y termina en los kilómetros de frontera con los Estados Unidos y sus ciudades. De alguna manera se corre un velo sobre esos otros migrantes, a los que los mexicanos pisoteamos igual o peor que los gringos a nosotros, que vienen con el estómago lleno pero sólo de esperanzas desde la frontera sur. Alicia adorada en Monterrey trata la agonía por la que atraviesan los latinoamericanos en su búsqueda del sueño americano.
A raíz de una visita a la ciudad de Monterrey en el 2002, Orlando Cajamarca descubrió que los chavos banda de esa localidad habían tomado la música vallenata colombiana como estandarte de su vida emocional. Durante una beca de residencia del FONCA y el Ministerio de Cultura de Colombia en 2003, vio la luz el primer acercamiento a este texto que, como todos los de Cajamarca, habría de probarse en escena con el método de creación colectiva con el grupo Esquina Latina (del que es fundador) para cobrar su forma "definitiva".
Con una dramaturgia que va de lo diegético al realismo mimético, pasando por la cultura popular, un ácido sentido del humor y la música vallenata a manera de hilo conductor, el autor nos da una visión poco edificante y singular de la mexicanidad en la frontera norte. Alicia adorada en Monterrey es una mirada muy colombiana al desarraigo de millones de latinos que se ven obligados a pasar por México.
Jaime Chabaud
