El accidentado recorrido de un hombre que, pese a todo, consigue encauzar sus inquietudes espirituales desde el vago sentimiento religioso del niño hasta las exigentes inquietudes creativas del gran narrador que llegara a ser. Haciendo acopio de datos, contrasta y sopesa sentimientos e impresiones, se abstiene de juzgar. Sabe que en la medida en que consiga comprender su pasado, podrá imprimir a su relato el aliento de verdad que sostiene a la genuina obra de arte.